domingo, 5 de septiembre de 2010

Cocinando la sesión

     Cocinando metafóricamente, claro, somos pinchadiscos, no dj's, no vas a oír una sola mezcla, si el poco trabajo que tiene un dj lo quitas de en medio, que mínimo que complicarte un poco y dejarte llevar por la improvisación, con resultados dispares, pero siempre pasándolo de putísima madre, diría que mejor que nuestra sufrida audiencia, al final ellos/as son quienes escuchan lo que pones. Me gustaría pinchar en algún sitio donde la gente sepa lo que estás pinchando, lo hemos hecho muy pocas veces, mecánicamente acabas tirando de "Hits" para que la gente se mueva, yo, como dice el Molle, "Para pinchar, ya pincho yo para mi en mi casa, hay que hacer que la gente baile". Que razón tienes Molle.
En cierto modo el dj es como un camarero, existe una distancia entre él y el cliente, en este caso oyente, y siempre te viene alguien muy borracho diciéndote, "Ponme esto, ponme lo otro", y aunque estés a lo tuyo te acabas enterando de lo que se cuece fuera.
Siempre me ha gustado esto de pinchar pero no disponía de medios, ni de lugar para hacerlo, hasta que en la presentación de la Asociación Cultural "Sueños Sonoros", nos pusimos manos a la obra, luego llegaría el Bullicio, el Tribbu y el Moloko. Jose María representa lo anárquico, con sus discos en muchas carpetas, discos con su caja, todo esto en una bolsa de viaje o algo así, pero dentro de ese pequeño desastre guarda su orden, mientras que yo, lo llevo todo en una carpeta ordenado por grupos, géneros, todo metódicamente colocado, nada de ordenadores, aquí a complicarse la vida, pese a todo nos entendemos a la perfección.
Luego está el tema del alcohol, dentro puedo beber mares de alcohol, que no acabo borracho, es increíble lo que hace la concentración, mientras que siendo yo el oyente puedo acabar extremadamente borracho.
Esto de pinchar me ha dado buenos momentos, no sólo por hacer algo que me gusta, también me ha hecho conocer a gente como, EME Dj, Dorian dj o Galán Dj, que son muy buenos haciendo esto y muy buena gente también, disfrutando de cerca de sus sesiones, y pinchando antes que ellos.
Este viernes 10 si nada lo impide estaremos pinchando en el Moloko, en Fuensalida a partir de la 1:00.

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